HAGAN LA PRUEBA Y VEAN CUAN BUENO ES EL SEÑOR.

 Invocar a Dios En La Prueba

La Biblia no conoce la desesperación. Aun en  la situaciones mas difíciles, cuando el ser humano esta quebrantado por la desgracia, la inquietud o el peso de sus pecados siempre le queda una salida. Todos nuestros caminos, aun los peores pueden desembocar finalmente en un Amor mas fuerte que todas las fuerzas de este mundo.

 

A ti, Señor, elevo mi alma, a ti que eres mi Dios.

En ti he confiado, que no quede avergonzado ni se rían de mi mis enemigos. Los que esperan en ti no serán confundidos, pero si lo serán quienes te mienten.

Haz, Señor, que conozca tus caminos, muéstrame tus senderos. En tu verdad guía mis pasos, instrúyeme, tu que eres mi Dios y mi Salvador.

Te estuve esperando todo el día, se bueno conmigo y acuérdate de mi. Acuérdate que has sido compasivo y generoso desde toda la eternidad.

No recuerdes las faltas ni los extravíos de mi juventud; pero acuérdate de mi según tu amor. El Señor es bueno y recto; por eso muestra el camino a los que han pecado.

Dirige los pasos de los humildes, y muestra a los sencillos el camino. Amor y lealtad son todos sus caminos. Para el que guarda su alianza y sus mandatos.

¡Rinde honor a tu nombre, Señor, y perdona mi deuda, que es muy grande! En cuanto un hombre teme al Señor, el le enseña a escoger su camino. Su alma en la dicha morara, y sus hijos heredaran la tierra.

El secreto del Señor es para quien lo teme, le da el conocimiento de su alianza. Mis ojos nunca se apartan del Señor, pues el saca mis pies de la trampa.

Mírame y ten compasión de mi, que estoy solo y desvalido. Afloja lo que aprieta mi corazón y hazme salir de mis angustias.

Contempla mi miseria y mi fatiga y quítame de encima todos mis pecados. Mira cuantos son mis enemigos y con que odio violento me persiguen.

Defiende mi vida, líbrame: no quede confundido por haber confiado en ti. Integridad y rectitud me guardaran; en ti Señor, he puesto mi confianza.

Oh Dios, redime a Israel de todas sus angustias.



 


 El Señor es Mi Pastor

El Señor es mi pastor; nada me falta
en verdes pastos el me hace reposar
y donde brota agua fresca me conduce
y reconforta mi alma.
Por el camino del bueno me dirige,
por amor de su nombre.
Aunque pase por quebradas oscuras
no temo ningún mal,
porque tu estas conmigo
tu vara y tu bastón me protegen
 y al verlas voy sin miedo.

Me sirves a la mesa
 frente a mis adversarios
con aceite tu perfumas mi cabeza
y rellenas mi copa.

Irán conmigo la dicha y tu favor
mientras dure mi vida,
mi mansión será la casa del Señor
por largo, largo tiempo.




ORACION PARA OBTENER LA SABIDURIA

Dios de nuestros padres, Señor de misericordia, por tu Palabra hiciste todas las cosas, y por tu Sabiduría formaste al hombre para que domine a todas las criaturas por debajo de ti, para que gobierne al mundo con santidad y justicia, y tome sus decisiones con recta conciencia: dame pues la Sabiduría que comparte tu trono, y no me excluyas del numero de tus hijos.

¡Mírame, soy tu sirviente, el hijo de tu esclava, un hombre débil cuya vida es breve, demasiado limitado para comprender la justicia y las leyes! Ni siquiera el mas perfecto de los hombres será algo sin la sabiduría que viene de ti.

Me elegiste como rey de tu pueblo, como juez para tus hijos y tus hijas. Me has dicho que te construya un templo en la montaña santa, un altar en la ciudad donde habitas, a semejanza de esa tienda celestial que habías preparado para ti desde el principio.

Junto a ti esta esa sabiduría que conoce todas tus obras, que estaba contigo cuando hacías el mundo, que sabe lo que le agrada y esta de acuerdo con tus mandamientos.

Haz que descienda desde el cielo donde todo es santo, envíala desde tu trono glorioso, para que este a mi lado en mis trabajos y sepa lo que te gusta.

Porque ella todo lo conoce y lo comprende; ella me guiara con prudencia en todo lo que haga, y su majestad me protegerá.

Entonces te serán agradables mis obras, gobernare a tu pueblo con justicia, y seré digno del trono de mi padre.

¿Quien, en realidad, podrá conocer la voluntad del Señor? ¿Quién se apasionara por lo que quiere el Señor?

La razón humana avanza tímidamente, nuestras reflexiones no son seguras, porque un cuerpo perecible pesa enormemente sobre el alma, y nuestra cascara de arcilla paraliza al espíritu que esta siempre en vela.

Si nos cuesta conocer las cosas terrestres, y descubrir lo que esta al alcance de la mano, ¿Quién podrá comprender lo que esta en los cielos?


Si nos cuesta conocer las cosas terrestre, y descubrir lo que esta al alcance de la mano, ¿Quién podrá comprender lo que esta en los cielos?

¿Y quien podrá conocer tus intenciones, si tu no les has enviado primero la Sabiduría, o no les has enviado de lo alto tu Espíritu Santo? Así fue como los habitantes de la tierra pudieron corregir su conducta; al saber lo que te agrada, fueron salvados por la Sabiduría.


 LLEVEN UNA VIDA EJEMPLAR 

Amados hermanos, por ser aquí extranjero y gente de paso, les ruego que se abstengan de los deseos carnales que hacen la guerra del alma. Lleven  una vida ejemplar en medio de los que no conocen a Dios; de este modo, esos mismos que los calumnian y los tratan de malhechores notaran sus buenas obras y darán gloria a Dios el día de su visita.

Sométanse a toda autoridad humana por causa del Señor: al rey porque tiene el mando; a los gobernadores, porque el los envía para castigar a los que obran mal y para animar a los que obran bien.

La voluntad de Dios respecto de ustedes es que, obrando el bien, acallen la ignorancia de los imbéciles.

Sean libres, pero no hagan de la libertad un pretexto para hacer el mal. Sean libres como servidores de Dios. Respeten a todos, amen a los hermanos, teman a Dios y respeten al que gobierna.

Que los siervos obedezcan a sus patrones con todo respeto, no solo a los que son buenos y comprensivos, sino también a los que son duros. Porque ahí esta el merito, en que soportan malos tratos sin haberlo merecido, habiendo habiendo actuado a conciencia y por Dios. Porque ¿Qué merito habría en soportar el castigo cuando se a fallado? En cambio, si pueden soportar que los traten mal cuando han actuado bien, eso es grande ante Dios. 

Para esto han sido llamados, pues Cristo también sufrió por ustedes, dejándoles un ejemplo, y deben seguir sus huellas. El no cometió pecado ni en su boca se encontró engaño. Insultado, no devolvía los insultos, y maltratado, no amenazaba, sino que se encomendaba a Dios que juzga justamente.

El cargo en su cuerpo con nuestros pecados en el madero de la cruz, para que, muertos a nuestros pecados, empezáramos una vida santa. Y sus heridas nos han sanado. Pues eran ovejas descarriadas, pero han vuelto al pastor y guardián de sus alamas.